19 febrero 2012
A propósito de Radio Futura
02 mayo 2011
El terrorismo oculto
Ahora que han matado a Bin Laden ¿es el mundo más seguro? No.
Los terrorismos y los terroristas son muchos y variados. Están en las cuevas recónditas de los desiertos y en los suntuosos despachos de de las ciudades. ¿Quién no recuerda lo que estaba haciendo el 11-S o el 11-M? ¿Alguien recuerda, ni tan si quiera, el mes y el año en que ocurrió lo de Ruanda? ¿Lo de Ruanda???? Si hombre, si, aquellas imágenes de unos negros matando a machetazos a otros negros…O acaso nos acordamos de los Duvalier y sus temibles Tontonmacut. Son tantos los ejemplos de este tipo de terrorismo sobre el que se pasa de puntillas porque pica pero no duele, porque ocurre en lugares tan lejanos que ni parece verdad que puedan existir, porque les ocurre a salvajes, casi animales y porque qué culpa tiene occidente? Cuando los teníamos colonizados no pasaban estas cosas!! Qué más da! Esto y muchas cosas más no son más que terribles imágenes que los telediarios tienen el mal gusto de poner a la hora de la comida o de la cena, que ya son ganas de fastidiar al personal, lo mejor es cambiar de canal y ver como fulanito y menganita se gritan hasta desgañitarse porque no se sabe quién, ha dicho que se lo montó con vete tú a saber cual.
Pero hay un terrorismo que ya no suele ser noticia; un terrorismo que no tiene un Bin Laden al que cazar, porque son muchísimos Bin Laden los que lo encabezan; un terrorismo contra el que no se invierte ni la millonésima parte de recursos económicos necesarios para acabar con él; un terrorismo del cual todos conocen la solución pero ninguno quiere aplicarla para no perder ni un céntimo de sus beneficios; un terrorismo que se ceba en los países del, despreciablemente llamado, tercer mundo; un terrorismo que cada día acecha a millones, cientos de millones de personas y acaba con la vida de miles, decenas de miles, día a día.
Un terrorismo que se gesta en los grandes centros financieros, que se firma con plumas de oro, que mantiene a dictadores feroces, que avergüenza a los gobiernos democráticos que no hacen nada por evitarlo. Qué más da! Ya llegará la Navidad para que nos acordemos de todas sus víctimas y soltemos unas moneditas con fuerza para que tintineen en el cuenco del mendigo…y a otra cosa.
Fuera de la polémica que generó esta foto de Kevin Carter, qué mejor alegoría del rico occidente….
Hoy millones de personas celebrarán la muerte de Bin Laden sin ser conscientes de que el mundo sigue siendo tan inseguro como antes.
14 abril 2011
He terminado de leer “El Evangelio según Jesucristo” de Saramago. Muy apropiado para los días que están por llegar. Una vez más volveremos a revivir la pasión, muerte y resurrección de Cristo. Es como uno de esos capítulos de Mentes criminales que repiten hasta la saciedad en FDF, sabemos qué va a pasar, quién es la víctima, quién el asesino pero seguimos viéndolo una y otra vez. Con lo que le pasó a este pobre hombre que vivió hace tantísimos años ocurre lo mismo; año tras año reconstruimos la escena del crimen, hacemos un perfil psicológico del “sudest” (bonito palabro), paso a paso reproducimos las torturas, vejaciones y muerte de este Señor, pero la gente sigue emocionándose, alaban la cara de dolor de la imagen del Nazareno, “que parece que se le oye gritar”, le dicen Guapo!! Y se conmueven con los lagrimones que lleva la Virgen en el rostro, que si los vendiésemos al peso comería una familia durante una semana. Cómo gusta el morbo; mira tú que religión que venera la cruz, un instrumento de tortura, ¿os imagináis al gobernador de Texas con una silla eléctrica en miniatura colgada al cuello?
Y qué decir del asesino de Jesús, porque fue uno sólo, no los romanos, ni los judíos, fue uno sólo, ese Dios al que adoran los que adoran a Cristo como hijo de Dios. Tiene mala sombra este Ser que hace venir al mundo a su hijo sólo para sacrificarlo por puro egoísmo:
“Ya íbamos bastante avanzados, pero aún no hemos entrado en lo esencial, dijo Dios, y dirigiéndose a Jesús, Este es el Diablo, de quien hablábamos hace un momento. Jesús miró a uno, miró luego a otro y vio que, salvo las barbas de Dios, eran como gemelos. (…) Desde hace cuatro mil años, soy dios de los judíos (…) sigo siendo el dios de un pueblo pequeñísimo que vive en una parte diminuta del mundo (…) dime, tú hijo mío, si puedo vivir satisfecho teniendo esta, por así llamarla, vejatoria evidencia todos los días ante los ojos: Yo no he creado ningún mundo, no puedo valorarla, dijo Jesús, Es verdad, no puedes valorarla, pero si puedes ayudar, Ayudar a qué, A ampliar mi influencia para ser Dios de mucha más gente”
Se las trae el Padre….Pero me gusta la Semana Santa, happening excesivo y barroco, que riete del cine 3D de Cameron, esto si que es cine, no en 3D, si no en 4D, por que en la de Cameron faltan los olores y en esta película que montamos cada año nos deleitamos con la fragancia de las flores, el olor de la cera derretida y los efluvios a sobaquina de la concurrencia, todo mezclado puede perforar las vías nasales de cualquiera, pero ahí estamos, aguantando como buenos figurantes.
“Entonces comprendió Jesús que vino traído al engaño como se lleva al cordero al sacrificio, que su vida fue trazada desde el principio de los principios para morir así, y, trayéndole la memoria el río de sangre y sufrimiento que se su lado nacerá e inundará toda la tierra, clamó al cielo abierto donde Dios sonreía, Hombres, perdonadle, porque él no sabe lo que hizo. Luego se fue mueriendo en medio de un sueño”
Y después viene el Domingo de Resurrección, pero esto ya interesa poco, la gente no dice “Mira que cara de alegría tiene Jesús por haber resucitado, si parece que se ríe de verdad”, más parece que les de rabia por haber terminado la semana de la tortura y el dolor, y sin apenas hacer caso al Resucitado ya empiezan a prepararse para volver a matarlo el próximo año.
“Pasados unos días, Jesús se unió con los discípulos, y María de Magdala fue con él, Miraré tu sombra si no quieres que te mire a ti, le dijo, y él respondió, Quiero estar donde mi sombra esté, si es allí donde están tus ojos”
30 mayo 2010
La Pereza se despereza
20 diciembre 2007
Cuento de Navidad
¡Qué asco! Todo lleno de sangre. Por el espejo del armario resbalan pequeños trozos ensangrentados de lo que antes fue un cerebro. ¡Quién lo diría! Descienden lentamente como la baba cristalina de un bebe por la comisura de los labios. Sin prisa. Ya no hay prisa. Lenta es también la música que suena, sin conciencia del estado de las cosas ¡hermosas notas para morir!
Chup... Chup... Chup... Gotas de sangre espesa recorren el camino desde la herida hasta la punta de una guedeja de pelo, se desprenden y caen unas sobre otras. Podría ser hermoso, pero no lo es, la muerte casi nunca lo es. ¡Pero esa coreografía sanguínea...! Las brillantes gotas rojas adaptando su forma a cada parte del recorrido, en perfecta redondez o en sutil estiramiento, la caída desde la punta del pelo hasta el mar rojo de la alfombra, Esther Williams no podría superar un salto tan perfecto. Lástima el color oscuro del edredón, la sangre luce más reposando sobre tonos claros. Tampoco el rojo del traje ayuda mucho, pero sí los anchos ribetes blancos empapados del color de la sangre, color que se difumina al acercarse a los bajos hasta quedar en diminutos puntos rojos, enormes contra el inmaculado fondo blanco.
- La ventana de la habitación de matrimonio estará abierta. No tendrás ningún problema para entrar - le dijeron.
En una sola noche podía conseguir la cantidad necesaria. Ahora, sobre la cama, la cabeza reventada de un disparo; se acabó. Todo se acabó. Antes de llegar aquí había estado en tres casas, aun le quedaban varias más y el tiempo, el impaciente tiempo, le empujaba a correr.
Entra por la ventana, da un traspié, algo cae al suelo rompiéndose sonoramente; tantea la oscuridad ¡Maldita sea!, el equipo de música. Suenan las notas de Bach. De repente una luz cegadora, un giro rápido, no puede ver nada, pero sí oír. ¡BANG! El eco del disparo se impone en la habitación, luego el silencio de la música. Un pequeño grupo de personas se agolpan en la puerta.
- Pero... ¿Qué es esto? ¡Dios mío! - pregunta la esposa.
- Un ladrón. Le he disparado - contesta el marido.
- No, ¡por Dios! Es... es el de la agencia - grita la esposa.
- ¿Agencia? ¿Qué coño de agencia? - grita el marido.
Los invitados, sin atreverse a cruzar el umbral, empujan, se agachan, se estiran, no quieren perderse detalle. Murmuran, susurran: ¡Qué horror! ¡Qué espanto!
Qué cosas tiene la vida. Qué cosas tiene la muerte. Ellas lucen hermosos trajes de fiesta, ellos están impecables dentro de sus smokings. ¡Cuánta elegancia para un velatorio improvisado! Si pudiera verse, si pudiera verlo su madre. Pobre mamá, quién le comprará ahora la secadora. ¡Con la maldita humedad la ropa no se seca nunca!
- Era la sorpresa para los niños - solloza la esposa.
- Pues la sorpresa se la ha llevado él - comenta alguien, y alguien más no puede reprimir una risita ante la vil ocurrencia.
- Y ¿cómo iba a saberlo? En esta casa a mí nadie me cuenta nada - se lamenta el esposo.
- Si es que nunca me escuchas cuando te hablo. Sólo tienes oídos y tiempo para tus cosas...
Y la pareja discute sobre un tema sin importancia, mientras el chico de la agencia, con su traje de Papá Noel, deja correr su sangre sobre un lecho de lujo, igual que aquellos de las películas: “Dormir en una cama de esas debe ser la hostia”, decía.
03 julio 2007
Liberté, Égalite, Fraternité ¿Para Quién?
ELPAIS.com 03/07/2007
Los abogados de seis de los supervivientes del genocidio registrado en Ruanda entre tutsis y hutus en 1994 han solicitado que los ex ministros franceses de Asuntos Exteriores Hubert Vedrine y Alian Juppé y el de Defensa Pierre Joxe, sean interrogados. Los letrados insisten en que la juez militar que se encarga de la instrucción del caso debe investigar el papel diplomático jugado por Francia en la masacre. La sospecha radica en que París podría haber estado al tanto del genocidio que se preparaba en el país africano.
Las acusaciones se apoyan en una serie de documentos desclasificados de los archivos del Palacio del Elíseo que permanecían en la Fundación Mitterrand. Los abogados de los supervivientes han trasladado esos documentos al diario francés Le Monde, y en ellos se apunta que las autoridades francesas podrían haber tenido indicios desde años antes de que iba a producirse un genocidio en Ruanda.
En concreto, resulta clave la existencia de varias notas de diplomáticos y militares franceses en las que se da cuenta que el gobierno de Kigali armaba a las guerrillas hutus y de las acciones llevadas a cabo contra la población tutsi desde 1991.
Pese a las conclusiones de una investigación parlamentaria llevada a cabo poco después del genocidio y de la publicación de varios libros de investigación sobre los hechos, desde París siempre se ha negado esta versión y se ha defendido, del mismo modo, que sus soldados, bajo mandato de la ONU, fueron los únicos que permanecieron en Ruanda cuando el resto países del Consejo de Seguridad lo habían abandonado.
Sobran las palabras.
No hay palabras para describirlo.